TOMATES SECOS EN ACEITE

Hay un bar en el que sirven unos tomates secos en aceite acompañados de tapenade y queso de untar que están de vicio. Además, esos tomates llenos de sabor se pueden usar para ensaladas o para hacer una deliciosa focaccia de tomates secos. Bueno, un día me dijeron una forma sencilla de conseguirlos y conservarlos para usarlos siempre que me apetezcan.

Os paso la receta que a mi me ha funcionado muy bien. He de advertiros que la calidad de los tomates secos es muy importantes, en una ocasión probé la receta con unos tomates secos de menos calidad y el sabor no era el que buscaba.

Ingredientes:

- tomates secos al sol (los que están secos en horno tienen otro sabor que no me acaba de convencer)

- agua

- aceite

- pimienta negra, de jamaica, rosa... (o una mezcla de todas ellas que es la que usé)

No hay cantidades porque las cantidades de agua y aceite dependerán de la cantidad de tomates que compréis. Al igual que la cantidad de pimienta, dependerá del sabor que queramos obtener a pimienta.

Preparación:

Hervimos agua en un cazo, la suficiente para cubrir la cantidad de tomates que hayamos comprado, una vez haya hervido apagamos el fuego, ponemos los tomates en el agua, tapamos y dejamos reposar durante al menos 20 minutos.

Pasados los 20 minutos, secamos muy bien los tomates con papel absorbente. Este paso es muy importante, si fuese necesario dejarlos secar entre el papel absorbente un rato.

Una vez secos, los metemos en un bote esterilizado mezclándolos con la mezcla de pimientas. Cuando ya los tengamos acomodados, los cubrimos con aceite de oliva y los tapamos muy bien. Los dejamos reposar al menos un día, aunque cuanto más tiempo los dejéis reposar, mejor sabor obtendréis.

Espero que probéis hacerlos y buen provecho!!