La idea surgió de una papilla que quería hacerle a mi pequeña a la que le cuesta la cuchara. Así que pensé que si asaba la calabaza (en Valencia es un postre tradicional) y la mezclaba con algunas verduras, igual le gustaba y superábamos el momento cuchara.
Al probarla para comprobar que era comestible para una bebé, me recordó un entrante que probé en el restaurante avenida 2.0 y creé una receta similar. Seguramente no tenga nada que ver, pero el super-sabor que tenía ese entrante me inspiró y me incitó a intentar sacar una versión parecida.
Probarla y me decís que tal está.
Ingredientes:
- 1 calabaza asada
- 1 cebolla dulce
- 100 grs judías verdes
- 1 l. agua aprox. (o caldo de verduras o pollo)
- 1/4 cdita jenjibre en polvo
- 1/4 cdita comino en polvo
- 1/2 cdita canela en polvo
- 2 toques de tabasco (opcional)
- cebolla crujiente (al gusto)
- 4 huevos (uno por comensal)
- queso rallado (opcional)
- Aceite
- Sal y pimienta
Preparación:
En una olla ponemos un poco de aceite y ponemos la cebolla a pochar con una pizca de sal.
Cuando la cebolla haya transparentado, añadimos las judías verdes cortadas a trozos pequeños y rehogamos unos minutos.
Añadimos las especias y le damos un par de vueltas para que suelten sus aromas.
Con una cuchara, sacamos la pulpa de la calabaza asada y la incorporamos al rehogado anterior.
Le damos unas vueltas y añadimos el agua hasta cubrir 2 cm por encima de la mezcla anterior.
Dejamos que cueza unos 20 minutos hasta que las judías estén bien tiernas.
Lo trituramos todo y lo pasamos por un colador para que quede una crema fina y sin grumos ni fibras de la calabaza o las judías.
Dejamos a fuego lento para que repose un poco la crema y vuelva a coger color (al triturar, entra aire y la crema se vuelve más blanquecina, al dejarla reposar al fuego, vuelve a coger su color natural), añadimos el tabasco para darle un toque picante y rectificamos con sal y pimienta.
Es el momento de pochar los huevos durante 4 ó 5 minutos, dependiendo del tamaño.
Para emplatar, ponemos primero la crema en el fondo del plato, espolvoreamos un poco de queso rallado en el centro, la cebolla crujiente y coronando el plato el huevo poché.
Listo para degustar!!
Buen provecho.-
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